contador de visitas

4/28/2011

Sabía que no quería buscar en otra parte cuando te encontré a ti. Aquel día que nos encerramos en casa...


Aún lo recuerdo. Estábamos deshojando recuerdos punteados en tu guitarra marrón. Encendiste un cigarrillo de aquel tabaco que tanto odio, y miramos al unísono hacia la ventana... Yo, caprichosa quise poner un rayo de sol a aquel día mojado y te pedí que me escribieras algo bonito. Me pediste que me quitara la camiseta y no tardaste más de medio segundo en tatuar mi espalda. Me apresuré a buscar un espejo, mientras intentabas terminar de afinar aquella vieja guitarra.
''
Es lo único que pude ver a través del cristal. ¿?
- Sí, . Contestó él. eres lo más bonito que he visto en la vida


Después, siguió empeñado en afinar la guitarra. No me dijo nada igual en lo que transcurrió de tarde. Pero lo miré y me dí cuenta de que no hace falta gritar desde lo alto de un rascacielos un 'te quiero' para saber  que el amor es tan simple como dos palabras tontas grabadas a fuego en tu piel.

1 comentario: